Hechos 16:34 “Y llevándolos a su casa, les puso la mesa; y se regocijó con toda su casa de haber creído a Dios”
Fue cuando Juan el bautista supo desde el vientre que Jesús ya venía.
Lucas 1:44-46 Porque tan pronto como llegó la voz de tu salutación a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre.
Luc 1:45 Y bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor.
Luc 1:46 Entonces María dijo: Engrandece mi alma al Señor
Celebraban que el mar se había abierto en dos.
Éxodo 15:20 Y María la profetisa, hermana de Aarón, tomó un pandero en su mano, y todas las mujeres salieron en pos de ella con panderos y danzas.
Éxo 15:21 Y María les respondían: Cantad a Jehová, porque en extremo se ha engrandecido;
Ha echado en el mar al caballo y al jinete.
Fue un momento en que Dios restauró y este tipo de danza es para recibir a los victoriosos
1 Samuel 18:6 Aconteció que cuando volvían ellos, cuando David volvió de matar al filisteo, salieron las mujeres de todas las ciudades de Israel cantando y danzando, para recibir al rey Saúl, con panderos, con cánticos de alegría y con instrumentos de música.
Dios puede en alguna manera prepararlo a uno para que puedan pelear ciertas batallas.
Esdras 3:12 “Y muchos de los sacerdotes, de los levitas y de los jefes de casas paternas, ancianos que habían visto la casa primera, viendo echar los cimientos de esta casa, lloraban en alta voz, mientras muchos otros daban grandes gritos de alegría”
Los gritos de júbilos son expresiones de alabanza a Dios
Después de ser restaurado podrán haber expresiones de danza
Lucas 15:7 “Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento.
Un momento para danzar es por la sanidad.
Hechos 3:1-8 Pedro y Juan subían juntos al templo a la hora novena, la de la oración.
Hch 3:2 Y era traído un hombre cojo de nacimiento, a quien ponían cada día a la puerta del templo que se llama la Hermosa, para que pidiese limosna de los que entraban en el templo.
Hch 3:3 Este, cuando vio a Pedro y a Juan que iban a entrar en el templo, les rogaba que le diesen limosna.
Hch 3:4 Pedro, con Juan, fijando en él los ojos, le dijo: Míranos.
Hch 3:5 Entonces él les estuvo atento, esperando recibir de ellos algo.
Hch 3:6 Mas Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda.
Hch 3:7 Y tomándole por la mano derecha le levantó; y al momento se le afirmaron los pies y tobillos;
Hch 3:8 y saltando, se puso en pie y anduvo; y entró con ellos en el templo, andando, y saltando, y alabando a Dios.
Se regocijaron y maravillaron por como Jesús respondía.
Lucas 2:43 “Al regresar ellos, acabada la fiesta, se quedó el niño Jesús en Jerusalén, sin que lo supiesen José y su madre, Y pensando que estaba entre la compañía, anduvieron camino de un día; y le buscaban entre los parientes y los conocidos;
Luc 2:45 pero como no le hallaron, volvieron a Jerusalén buscándole.
Luc 2:46 Y aconteció que tres días después le hallaron en el templo, sentado en medio de los doctores de la ley, oyéndoles y preguntándoles.
Luc 2:47 Y todos los que le oían, se maravillaban de su inteligencia y de sus respuestas.
1 Tesalonicenses 5:16 “Estad siempre gozosos”
El gozo es una manifestación de alabanza.